La pérdida de la poca protección que los seguidores de Jesús tenían en Egipto hace que sea difícil ser cristiano en ese país controlado por los Hermanos Musulmanes, lo que produce la huida de cientos de ellos.
Brittany Tedesco, la directora para África de Christian Aid Mission (Misión de Ayuda Cristiana), opina que los ataques en contra de los cristianos no tienen precedentes.
"Son muy descarados. Estamos hablando de mujeres que son violadas en plena luz del día, de hombres atacados, o de hogares de cristianos que son saqueados. Y realmente no tienen remedio", asegura.
A pesar de ello, un líder ministerial anónimo y sus colaboradores están determinados a quedarse ahí porque muchos están abiertos al mensaje de Jesús. Tedesco agrega que "los musulmanes nominales incluso están asustados por lo que ven de este gobierno tan radical. Esto no es lo que ellos querían para su nación. Ver el desarrollo de los eventos también los ha asustado".
Sin embargo, entidades como Christian Aid mantienen un programa de patrocinio de misioneros, para esta región del mundo.
